La estación donde se nos invita a brotar y a florecer.
Esta es la temporada de la esperanza, la nueva vida y nuevos comienzos.
Los días son más largos y la energía es más expansiva. Sube la temperatura.
Estas circunstancias inducen a nuestro organismo a una regulación de los ritmos circadianos mediante un cambio en la secreción de determinadas hormonas: endorfinas, cortisol, melatonina, etc. Ocasionando una alteración de los ritmos biológicos, que deben adaptarse a las nuevas condiciones ambientales, más exigentes en el consumo diario de energía.
Por este motivo, muchas mujeres son afectadas por la astenia primaveral con síntomas como:
• Cansancio y somnolencia durante el día.
• Falta de energía.
• Alteraciones del sueño.
• Irritabilidad.
• Ansiedad.
• Pérdida del apetito.
• Cefaleas.
• Problemas de concentración.
• Falta de motivación.
Según la Medicina China, El hígado es el órgano de la primavera, su color es el verde y su sabor, el ácido, se relaciona con los tendones y ligamentos.
El hígado es el órgano más grande del cuerpo, con una capacidad única de reproducción de su propia célula, y además de a los alimentos, es sensible a las emociones, sobre todo a su propia emoción: la ira y el enfado.
¡Vamos a cuidar el hígado y eliminar las costumbres caducas!
¡Vamos a liberar la ira y el enfado permitiéndonos sacudir esa energía!
Para ello te invito a que identifiques que es lo que te tiene irritada, enfadada. Busques un espacio-tiempo para ti y saques, liberes esa sensación en tu cuerpo. Conecta con tu mandíbula, comienza gesticulando, abriendo y cerrando la boca. Permítete moverte, sacudirte, dar patadas al aire, pegar a un cojín, gritar… ¡confía en tu cuerpo! Atrévete a experimentar, la primera vez es un poco forzado y vienen un montón de resistencias. ¡Date el permiso para hacerlo, en varias ocasiones!
Te aseguro que con la práctica vas a lograrlo y después te sentirás ligera y en paz. Ten en cuenta que es una de las emociones más castradas en las mujeres y por ello perdemos nuestro poder, nuestra fuerza y capacidad de sentir placer.
En ayunas, bebe un vaso de agua caliente con zumo de limón, según la Medicina Ayurveda, ayuda y facilita a eliminar toxinas.
Introduce zumos de frutas y verduras frescas. Una de mis mezclas preferidas: Apio, zanahoria, manzana, jengibre y limón ¡Riquísimo!
Cepilla con un guante de crin tu piel, durante cinco minutos antes de ducharte. Esto estimula la linfa y ayuda a la circulación.
Incluye saunas y baños de vapor en tu rutina semanal.
Infusiones de Cardo mariano, diente de león, alcachofa, salvia y boldo.
Camina en la naturaleza y llénate de Prana o energía vital.
¡Recuerda siempre Cuidar de ti!
Bendiciones
María
